martes, 7 de noviembre de 2017

CARRERA HACIA ADENTRO

El otro día viajando en avión estuve hojeando una revista dónde un artículo con el título “Carrera hacia adentro” de Karim de Schwank, psicóloga clínica, me detuvo para su lectura. Me gusto la facilidad de expresión, y el contenido que me llevo a reflexionar. Así que me he tomado el maravilloso tiempo en transcribirlo para poderlo compartir y contribuir en el dar un poco más de luz en estos tiempos tan convulsos.


Carrera hacia adentro
La vida la vivimos muy deprisa. Los días se pasan, las semanas se terminan, los meses vuelan y los años se sienten cada vez que nos vemos al espejo. ¿cómo es que todo pasa tan rápido? ¿Cómo es que hemos llegado a perder conciencia de nuestra existencia? ¿Cómo es que hemos tenido que enfocarnos en la obtención de objetos materiales y se nos ha olvidado vivir? ¿Cómo es que llamamos éxito en la vida a los títulos, posiciones y posesiones? ¿y cuando morimos que? ¿Se pierde todo? ¿Es un fracaso? ¿Es la muerte ese ser aterrorizante del cual deseamos escapar? ¿O al que deseamos desafiar?

Todas estas son preguntas que quizá mucho nos hacemos, aunque no todos nos atrevemos a decirlo en recio. El sentido y el propósito de la vida es algo que se explora muy poco. Conversaciones en las que se invita a la muerte no son conversaciones muy atractivas para muchos. Generalmente el tema de la muerte es visto como un tema lúgubre, atemorizante y pesimista. Los seres humanos estamos en la desesperada búsqueda de la felicidad. Descansamos poco de esta carrera hacia lo que suponemos que nos dará la felicidad, pero no nos paramos a revisar si el camino hacia esa meta está siendo placentero. Muchos de nosotros perdemos la vida tratando de encontrar aquello que quizá ni siquiera existe.
Desde muy jóvenes, leemos dentro de nuestro contexto social y cultural aquellas demandas, expectativas y roles que se nos imponen. Esta imposición no es necesariamente explicita, ya que mucho lo aprendemos al leer entre líneas. No siempre se menciona específicamente lo que se espera de nosotros, a pesar de que con regularidad nos resulta evidente. Nuestras necesidades de dependencia generalmente se enfocan con mucho detenimiento en todo aquello que nuestros seres queridos esperan de nosotros con la finalidad de complacerlos y por ende recibir su aprobación. Su aprobación y aceptación son una necesidad humana básica, por lo que de forma inconsciente y desde una edad muy temprana, nos enfocamos en la complacencia hacia otros como nuestra meta más importante.
Complacer a nuestros padres resulta ser ese foco de felicidad. Recibir su aprobación y reconocimiento es nuestro alimento. De pequeños/as, en nuestro estado de vulnerabilidad, no podemos correr el riesgo de recibir su desaprobación. La desaprobación de nuestros padres se convierte muchas veces en la forma de trauma más frecuentes y más difíciles de erradicar. La aceptación de nuestros padres es el antídoto ante la baja autoestima y la depresión. Cuando nos sentimos amados y reconocidos podemos lograr interiorizar ese concepto de valía de nosotros/as mismos/as. De lo contrario, se nos hace muy difícil lograrlo. La carencia de aceptación de nuestros padres es el terreno fértil para la duda, la desvalorización y la vergüenza tóxica.
Vergüenza toxica es un término que se refiere a la sensación de que hay algo dentro de nosotros que es inherentemente malo o indeseable. Dado que es indeseable, intentamos erradicarlo, esconderlo o cambiarlo. La meta de la vergüenza toxica es convencernos de que ser la persona que somos no es adecuado, por lo que debemos convertirnos en esa persona que creemos que los demás desean que seamos. De esta manera, la meta es buscar el prototipo de persona que se considera el ejemplo para emularla. Es así, como se da inicio a la competencia, a los celos, a las luchas de poder y a los esfuerzos por intentar ser mejor que otros. Para poder sentirnos mejor y mitigar esa vergüenza toxica, típicamente intentamos buscar las debilidades de las otras personas y hacerlas evidentes, con la intención de hacernos sentir mejor con la creencia de nuestras propias debilidades. Es común observar a las mujeres viéndose unas a las otras de pies a cabeza, tomando nota de todos los detalles para encontrar algo desagradable que puedan criticar o bien para tomar nota e intentar verse igual de bellas que ellas. Sin embargo, la percepción de la belleza no siempre se expresa, más bien se considera como una meta más de competencia.
Lo triste resulta qué en el intento de emular a las demás personas, lo que verdaderamente estamos haciendo es desvalorizando nuestra propia identidad. Las comparaciones únicamente nos llevan a la crítica y a la condena. Lo más triste es que toda crítica y toda codea que hacemos a los demás, es nada más que el reflejo de la crítica y condena que estamos haciendo a nosotros/as mismos/as. En realidad, las comparaciones provienen de nuestro sentido quebrantado de aceptación personal. La carrera de nuestra vida se convierte en llegar al peso perfecto, a las medidas perfectas y a la figura perfecta, a la necesidad de tener posición, las posesiones y el estatus social.
Es importante aclarar que el cuidado de la figura y la presentación física, así como el deseo de progreso y satisfacción profesional no son aspectos negativos del ser humano. Al contrario, el cuidado personal y la cultivación de la persona son elementos trascendentales en la vida de significado del ser humano. Sin embargo, dado nuestro ingreso a la vida de forma inconsciente, es de formas inconscientes en las que damos inicio a la construcción de nuestra identidad basada en factores externos. Nuestra profunda dependencia nos obliga a ver más allá de nosotros/as mismos/as para la construcción de la idea de quien somos. Y el progreso de descubrir nuestra esencia resulta de ser el trabajo más especializado, delicado y difícil que existe.
Me gusta creer entonces que nuestro reto es poder ver más allá de nuestra carrera hacia el éxito en el mundo material. A pesar de que el prestigio, la fama y las posesiones materiales pueden ser la meta de algunos en el intento de alcanzar la felicidad, llega el día en que se realiza que nada de esto podrá ser capaz de otorgarnos la felicidad que tanto añoramos. La pregunta es entonces, ¿qué es lo que nos otorga la felicidad? Si nuestra carrera hacia la complacencia y hacia el prestigio y posición social no nos otorga la felicidad, ¿entonces es dónde radica esa posibilidad?
La educación se ha diseñado para ofrecer conocimientos sobre las cosas maravillosas de la evolución de la humanidad, la ciencia, la matemática y el lenguaje. Hemos estado, sin embargo, desprovistos de oportunidades para conocer sobre los aspectos sutiles de nuestro mundo interno. Poco sabemos acerca de nuestros miedos, inseguridades, frustraciones, preocupaciones, ansiedades, sueños, aspiraciones y creaciones. El mundo educativo ha olvidado prestar atención a los aspectos fundamentales sobre lo que es la cultivación del ser. la competencia, las comparaciones, las luchas de poder, las críticas, el “bullying”, los juicios, las condenas y las guerras, todas provienen de nuestro desesperado intento de alcanzar  un sentido de identidad, propósito y valor. No se nos enseña en ninguna parte sobre la importancia de nuestra autovaloración. No existen espacios en la vida en los que se pueda hablar libremente sobre nuestro dolor, nuestras pérdidas y nuestros miedos. Inclusive los grupos de apoyo de los 12 pasos, los cuales están basados en 12 tradiciones que prometen seguridad y confidencialidad, son quebrantados debido a la falta de conciencia que tenemos sobre la magnitud de nuestra vulnerabilidad y dejan de ser na opción para muchos.
Es fundamental por lo tanto que entendamos que la carrera hacia el éxito es la carrera que hacemos hacia adentro de nosotros mismos. Es éxito en la vida no radica en la complacencia en cuanto a convertirnos en lo que creemos que otros quieren de nosotros. El éxito radica en nuestra habilidad para expresar abiertamente la magnitud de lo que somos sin temor. Requiere de valentía para reconocer nuestro miedo al rechazo y poner voz a nuestra opinión y a nuestra versión del mundo. Nuestra vulnerabilidad más grande radica en el miedo al rechazo o al ridículo. Tenemos miedo de decir lo que pensamos por temor a no tener el visto bueno de los demás. Sin embargo, el sentido de expresión, de autonomía y de propósito de vida, las cuales son necesidades básicas de nuestra existencia, solo pueden alcanzarse al tener el valor de hablar con honestidad sobre nuestra postura personal.
Es importante aquí aclarar el concepto de honestidad. Muchas personas confunden honestidad con el permiso para ser crueles. Por honestidad debemos comprender que es tener la valentía de poner voz a lo que pensamos, así como a la manera en como interpretamos el mundo y como hemos encontrado significado. Esto no quiere decir que tengamos el derecho de tener opinión sobre el actuar o forma de ser de otra persona.
La felicidad verdadera radica en la libertad para ser, en sentir el gozo e expresar libremente quien somos. No se trata de expresar nuestra opinión sobre los demás, sino más bien de expresar abiertamente nuestros sesgos, nuestras formas de ver la vida, nuestros estilos de comunicación, la magnitud de como sentimos, la magia de nuestra carcajada y la LUZ de nuestro ser, sin los velos del miedo que nos limitan.




Cristina Mas

martes, 18 de julio de 2017

LA TÉCNICA DEL TÜNEL CARPIANO


En una publicación anterior, citamos la GRABACIÓN como técnica descubierta y aplicada por José Antonio Pascuas Rodríguez, en método terapéutico Senda.
Recordemos que en este innovador método terapéutico se utilizan muchas herramientas para trabajar: manos, técnica de la grabación o túnel carpiano, reflejo miotático defensivo (AR), símbolos, puntos de acupuntura, relaciones articulares, reflexoterapias varias, la palabra…

La historia ha dado siempre mucha importancia a las manos, ya que en ellas existen 2 chacras menores en sus palmas, considerándose esencial para los sanadores. A través de ellas fluye la energía y la podemos amplificar a través de la utilización de mudras o ciertos circuitos energéticos. Así, como la movilización de ciertas llaves, cada dedo encierra un significado profundo. Pero de esto ya hablaremos más llanamente en el próximo artículo.

La técnica del túnel carpiano es la síntesis de grandes saberes que están inscritos en las sabidurías antiguas; Kabbalah, numerología, mitología, medicina tradicional china, así como osteopatía y neurología actual… Esto nos permite articular la parte inconsciente autónoma con la parte consciente voluntaria volitiva facilitando una integración en la consciencia.

Esta técnica es vital y de gran importancia, con ella se crean nuevas sinapsis y circuitos neuronales que concretizan y actualizan el mapa arquitectónico cerebral de autoimagen, unificando e integrando en la unidad los diferentes planos o cuerpos que lo constituyen (físico, energético, emocional, mental y espiritual). Con todo ello, se establece una integración de los tres cerebros para crear un puente entre cuerpo-alma - espíritu. Todos sabemos que una de las principales causas de enfermedad es la falta de coherencia entre pensamiento-sentimiento- acción y por la falta de expresión de la consciencia.
Por lo tanto con la técnica del túnel carpiano, tal como indica la palabra túnel, nos lleva de la oscuridad a la luz. El hecho de poder atravesar la penumbra, que no es más que el integrar la dualidad interna en la que nos movemos diariamente, nos liberara de nuestros males, dolencias, las limitaciones creenciales, inercias emocionales, que nos desequilibran en todos los planos derivándonos hacia el dolor, la insatisfacción, tristeza, rabia, enfermedad… para ir  hacia la comprensión, equilibrio, armonía, amor.
En mtsenda (método terapéutico senda) esta técnica es un pilar sólido y esencial que se utiliza con un protocolo determinado que permite un trabajo holístico-integrativo. Que se enriquece y complementa con la medicina china, la medicina ayurvédica, el eneagrama, homotoxicología, tradición maya… y la transición del ego al alma.

El terapeuta que facilita una sesión de mtsenda es importante que tenga integrados estos y más conceptos para la efectividad del trabajo que es una llamada al despertar.  



Esperanza Pola Galé



miércoles, 20 de mayo de 2015

REFLEXIONES sobre el libro "EL TAO DE LA FÍSICA"


En la vida leemos diversos  tipos de libros pero  siempre llega el día en que aparece  alguno que te deja una huella y  te hace pensar, reflexionar y replantear la visión sobre la Vida y el Universo. En mi caso uno de estos libros ha sido el “Tao de la Física” del autor….., Me gustaría compartir ciertos párrafos que me han llevado a la profundización interior.


Primero:    “Las interacciones de las partículas pueden ser interpretadas en términos de causa y efecto, solamente, cuando los diagramas espacio tiempo son leídos en una sola dirección. Ahora, si tomamos los esquemas cuatridimensionales, sin una dirección de tiempo definida, no hay ni ANTES ni DESPUÉS y por ello, no hay CASUALIDAD.
Así los místicos afirman que al trascender el tiempo, también trascienden el mundo de las causas y los efectos. Al igual que nuestros conceptos corrientes de espacio y tiempo, la CAUSALIDAD, es una idea limitada a una cierta experiencia del mundo (lineal, estructurado), y debe abandonarse cuando ampliamos la experiencia ordinaria del dia a dia.
El tiempo, el espacio y la causalidad, son como un cristal a través del cual se ve lo absoluto………en lo absoluto no hay tiempo, ni espacio, ni causalidad.
Las tradiciones orientales, muestran enseñanzas de cómo trascender la experiencia ordinaria del tiempo a sus seguidores, y así, liberarse de la cadena causa y efecto, es decir de la esclavitud del Karma.
En este punto el misticismo oriental y la física relativista, unifican criterios y nos liberan de la esclavitud del tiempo.”

Como vemos este párrafo me lleva a crearme varias preguntas: ¿sería una definición de sincronía? ¿Este sería el mundo de lo simbólico?, ¿entonces podemos trascender el Karma, aquí y ahora, basándonos en esta atemporalidad, donde ya no existe la causa y el efecto?


Segundo: “MASA DE UN CUERPO—la medición del peso, es la atracción que la gravedad ejerce sobre un cuerpo, también es la INERCIA de un objeto. (es decir su RESISTENCIA a la aceleración).  La energía contenida en una partícula es igual a su masa—la INERCIA no es una propiedad intrínseca en la materia, sino una medida de interacción con el resto del universo”.

En este segundo párrafo me inmersa  a una reflexión……Cuando hablamos de INERCIA, en nuestra praxis, ¿hablaríamos de la resistencia EGOICA (entendiéndose como “materia”), a fluir y a interaccionar con el resto del universo?
¿Podríamos llamar iluminación (ILUMINADO—ser que no se resiste al flujo de la vida, sino que continúa moviéndose con él), o tomas de conciencia entonces, a esos estados de no INERCIA, es decir de fluir y interaccionar con el resto del universo?
Según buda, todo nuestro sufri -miento en esta vida, surge al APEGARNOS, a las formas fijas, lineales, objetos, personas, en lugar de aceptar y fluir con este universo perfecto de interacciones.




En resumen, aquí invito a interactuar y compartir con el lector sobre que le ha movido y que le ha sugerido estos párrafos presentados. 


Emilio Moreno Bautista.

lunes, 17 de noviembre de 2014

TRABAJO CORPORAL EFICAZ


Un trabajo corporal es muy recomendable cuando el individuo pretende conocerse mejor, ya que el cuerpo es el instrumento a través del cual nos expresamos y realizamos. En la musculatura corporal se halla impresa la particular historia de vida del ser humano, “el cuerpo tiene memoria”, y de ahí la conveniencia de abordar el tema intencionada y atentamente.

El objetivo del trabajo corporal es que la persona conecte con su cuerpo y tome conciencia de sus tensiones musculares inconscientes, pues es dentro de las posibilidades de cada individuo, la única manera que tiene de liberarse de ellas. Tomar consciencia es volver a llevar la atención dentro de uno mismo, ya que la existencia de bloqueos musculares inconscientes desvía la atención al exterior y facilitan que la persona desconecte de su percepción corporal interior y distorsione la percepción de la realidad.
Hagamos hincapié en varios aspectos del trabajo corporal:
¿Por qué digo BLOQUEOS INCONSCIENTES? Porque muchas veces adoptamos involuntariamente y sin darnos cuenta posturas que hacen perder nuestro eje central, incluso nuestra sensación corporal de molestar, son posturas adaptativas. Por ejemplo, si yo con 37 años fuera consciente de que voy “colgado en una percha”, voluntariamente modificaría la posición y dejaría de tener la comúnmente denominada chepa, pero si además me hiciera sentir dolor, con más razón evitaría tenerla; y sin embargo no es una cuestión de elección.

Estos bloqueos se asocian con la MUSCULATURA PROFUNDA y se fundamentan en emociones infantiles vividas y reprimidas. Si no se interviene para eliminarlos, dichos bloqueos se mantienen en el tiempo indefinidamente reconduciendo y perpetuando la salud del individuo. Tomando el ejemplo anterior, yo no podría deshacerme de la chepa de inmediato si la tengo desde la adolescencia, pero si además he generado compensaciones desde entonces debido a la represión de algún aspecto emocional de esa etapa de mi vida, está claro que la duración de cualquier desbloqueo muscular y la forma, le son propios a cada individuo.

Es interesante diferenciar entre musculatura profunda y superficial. La superficial es voluntaria, nos permite la movilidad corporal y la escojo acorde a las circunstancias del momento; sin embargo, la musculatura profunda está asociada a la estática, se encarga de mantenernos erguidos desde muy pequeños y ya interviene desde el momento en que aprendemos a caminar aún sin pensarlo.

Hay que tener en cuenta que los bloqueos musculares inconscientes proporcionan al cuerpo RIGIDEZ no sólo física, sino que también se reflejan emocional y mentalmente, es decir, una alteración en cualquiera de los tres planos repercutirá inevitablemente en los otros dos y viceversa. Se puede comprobar que el desbloqueo de una tensión muscular inconsciente durante el trabajo corporal, se trasladará no solo a una liberación somática, sino también psico-emocional, ya que todo trabajo corporal y holístico opera bajo el principio de Unidad del ser humano y del todo indivisible. En este caso es imprescindible para un desbloqueo definitivo, que el individuo tome consciencia de la interrelación de estos tres aspectos para la integración completa de sí mismo.

La LIBERACIÓN RESPIRATORIA es otro aspecto a tratar, ya que si no tiene lugar, me basaré en bloqueos musculares ya existentes. Tomar conciencia de la respiración y modificarla según unas pautas, no es indispensable al ser una función dependiente del Sistema Nervioso Autónomo, pero si necesario cuando se trata de ayudar al individuo a que sienta sus bloqueos musculares y descargue las tensiones que le impiden respirar de modo natural. El nuevo patrón respiratorio llevado a cabo durante todo el ejercicio será abdominal, bucal, sonoro, continuado y profundo.

Sin embargo, la efectividad del trabajo corporal no sólo depende de la disponibilidad del individuo en su toma de conciencia postural, emocional y respiratoria, sino también de la capacidad del terapeuta para abordar cuestiones emocionales, ya que en este contexto, la relajación de tensiones musculares se manifiesta como una descarga del exceso de energía mantenida anteriormente en la contracción, que al liberarse a través de reacciones emocionales y físicas muy diversas, permitirán a posteriori un alivio interior y la INTEGRACIÓN DEL SER.



Esperanza Pola Galé